DESCAFEINADO DESAFÍO EN LA RÀPITA, CON TRES VACAS DESTACADAS DE CADA GANADERO: PRESUMIDA, MONTAÑESA Y PEQUEÑA

Mucha expectación creada en la tarde de ayer en San Carles de la Ràpita en el desafío organizado por la Penya Taurina La Tradició, con dos ganaderías que pasan por un buen momento, Hnos. Navarré y Hnos. Príncep, y otra más consolidada como es La Paloma. Todos esperábamos bastante más, el nivel de las reses anunciadas era alto y algunas no respondieron a las expectativas. Analicemos la tarde por partes.

En primer lugar correspondió a los turolenses, que se presentaron con el siguiente corro:
  1. Alcahueta nº 221 g. 5.
  2. Cacereña nº 132 g. 1.
  3. Presumida nº 163 g. 3
  4. Campillero nº 242 g. 6.
Alcahueta tuvo buenos detalles y otros no tanto, destacó un salto al banco algo cruzada en la que sorprendió a un joven, al que estuvo a punto de alcanzar. Lo que no gustó es que fue a menos y se aquerenció por la zona de toriles. Por su parte, Cacereña fue bastante bien por tierra, con muchas patas y metió en una ocasión la cabeza en barrotes en busca de presa. Presumida la mejor, una subida muy fuerte a la carrera tras Oliva, trabajó con genio la barca, y saltó la tijera. Mucha movilidad y siempre buscó guerra. El toro Campillero poca cosa, levantó en una ocasión el banco y poco más.


Alcahueta.

Alcahueta.

Alcahueta.

Alcahueta.

Cacereña.

Presumida.

Presumida.

Presumida.

Presumida.

En segundo lugar los de Xaló se presentaron con dos de sus vedettes y una de las jóvenes que destacan:
  1. Pajarraca nº 13 g.5.
  2. Norteña nº 29 g. 6.
  3. Montañesa nº 8 g. 2.
  4. Delicioso nº 28 g. 6.
La berrenda en negro no acabó de acoplarse a la plaza, se le hizo grande y acabó en muchas ocasiones aculada a las barreras, no me gustó nada. Trabajó la barca, pirámide y banco, y se arrancó franca a un quiebro. A Norteña se le vió con ganas pero ya sabemos que quiere la chicha cerca, hay que dejársela venir al milímetro para que ella responda. Pocos la recortaron, y algunos intentaron arrastrarla a la barreras para que se levantara pero no hubo suerte. Montañesa tuvo una notable actuación, le he visto de mucho mejores, pero dejó detalles marca de la casa. Se levantó en una carreta con rabia y armó un buen lío en las rateras. Hubo un par de momentos de pánico, en el que la multitud de gente que se encontraba dentro de ellas no sabía para donde tirar. Por suerte, no hubo ningún percance. Siempre se buscó ella sola la faena, y no hubo mucho acople con los movedores. Esta vaca no es fácil de trabajar, va en muchas ocasiones a su aire y hay que intentar que coja celo para que rompa para adelante. Al público de La Ràpita le encantó y le dio una sonora ovación. El novillo Delicioso levantó con ímpetu la tijera y dejó un par de remates en los palos.


Pajarraca.

Pajarraca.

Pajarraca.

Pajarraca.

Pajarraca.

Norteña.

Norteña.

Norteña.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

Montañesa.

La última ganadería en actuar fue la de los Hermanos Príncep, con los siguientes animales:
  1. Pequeña nº 3 g. 8.
  2. Escultora nº 27 g. 2.
  3. Fusilera nº 32 g. 8.
  4. Dinamito nº 14 g. 6.
De todo el conjunto me quedo con Pequeña, no paró ni un momento en toda su estancia en la enorme plaza de La Ràpita. Tocó los obstáculos con alegría y transmisión, sobre todo la barca. También dejó un salto en la tijera cruzada con mucho peligro. Buena vaca. Escultora y Fusilera no acabaron de tener el día, un poco sueltas y sin centrarse en nada. Dinamito remató con fuerza en el banco y lo levantó a buena altura, pero se le han visto mejores actuaciones. 


Pequeña.

Pequeña.

Pequeña.

Pequeña.

Escultora.

Los premios del desafío concedidos por la peña fueron los siguientes:

Mejor conjunto para La Paloma.
Mejor vaca para Montañesa de La Paloma.
Mejor toro para Dinamito de Hermanos Príncep.

De acuerdo con los trofeos a mejor vaca y mejor toro, el más discutible es el mejor conjunto, bajo mi punto de vista, más merecido por los Hermanos Navarré. Por último, me gustaría agradecer a la gente de esta localidad que me acogió en su carreta para poder fotografiar a la vaca Montañesa, un peligro quedarse con ella debajo en las rateras.



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